Dibujar o colorear Mandalas es considerado terapéutico por muchos psiquiatras. Es la técnica de relajación oriental por excelencia dirigida a todas las edades. Los Mandalas fomentan la creatividad y la concentración, y creedme, la práctica supera a la teoría, a mí me encanta trabajar con ellos. Se pueden utilizar como técnica de meditación, de relajación o de autoterapia. ¿Quieres saber más? Sigue leyendo!
El Mandala es, visualmente, un conjunto de figuras y formas geométricas que suelen
representar las
características del universo. Se suelen utilizar desde tiempos remotos para concentrar la energía en un solo punto durante la meditación. Muchas son las culturas y religiones que poseen configuraciones mandálicas (con intención espiritual): los Mandalas Hindúes son lineales, los budistas son más figurativos y puedes encontrar Mandalas incluso en el arte cristiano medieval.
Es muy probable que esta universalidad de las figuras mandálicas se deba al hecho de que las formas concéntricas sugieren una idea de perfección (de equidistancia con respecto a un centro) y de que el perímetro del círculo evoque el eterno retorno de los ciclos de la naturaleza.
Dentro de las múltiples técnicas de relajación orientales, se encuentra la de pintar mándalas. Esta técnica de relajación no requiere ninguna disciplina expresa, como puede serlo en otras, ya que quien está haciéndolo lo colorea según sus gustos estéticos e imaginativos. La pueden realizar personas de cualquier edad, siendo además una actividad que fortalece la creatividad. Según los expertos éstos son los beneficios de colorear Mandalas para los niños:
1. Potencia su capacidad de atención, concentración y memoria: durante el proceso el niño se abstrae de lo que le rodea permitiendo que su agitación interior desaparezca.
2. Fomenta el control y el dominio del cuerpo, sobre todo la motricidad fina, lo que favorece la capacidad de escritura y su lateralidad.
3. Equilibra los dos hemisferios cerebrales, tan importante para un buen aprendizaje.
4. Desarrolla la paciencia: ya que esta técnica requiere tiempo y tranquilidad.
5. Fortalece el descanso y el sueño.
6. Combate el estrés y la tensión.
7. Estimula la creatividad, la imaginación y la libre expresión
8. Ayuda a la formación de la inteligencia y el razonamiento
9. Ayuda también a ampliar la conciencia y la intuición
10. Fortalece su percepción espacial, le hará mejorar en cómo él se sitúa en el espacio y ayuda en el desarrollo del esquema corporal
11. Desarrolla sus sentidos y la capacidad de percepción
12. Mejora el equilibrio interno y mental: la calma
13. Es un buen medio para iniciar a la meditación
Y el que considero más importante: dibujar o colorear Mandalas resulta una vivencia agradable, un proceso de autoconocimiento, de expresión de tus sentimientos y de expresión a través del arte, sientes relajación, calma, diversión, comodidad y felicidad.
Por otro lado, múltiples son los estudios de ésta técnica aplicada a la educación y lo que los expertos concluyen es que:
Ésta técnica ayuda al tratamiento de TDAH. Los niños con TDAH que realizan esta técnica un par de horas a la semana durante dos meses, mejoran su concentración y su capacidad de atención.
Como bien dijo el psiquiatra Carl Gustav Jung: “Pintar mandalas calma y relaja la psyche”. La técnica se puede desarrollar de muchas maneras: coloreando con ceras, rotuladores, pinceles…
Lo que sí se debe tener en cuenta es:
1. A la hora de pintar se debe mantener la dirección con la que se empezó y se debe acabar de pintar en ese momento, de no ser así no se pintará al día siguiente por ejemplo porque el estado de ánimo del que pinta será otro.
2. Es muy importante que la actividad no sea dirigida: quien esté coloreando el Mandala debe tener total libertad de elección de colores, para potenciar así la imaginación, la creatividad…, aunque a simple vista no combinen y el resultado “no guste” estará bien siendo ésta la elección del que pinta.
3. Durante el proceso se debe crear un ambiente idóneo para la concentración y relajación: estar en silencio, no hacer interrupciones, poner música de relajación (de fondo y suave).
Próximamente colgaré un “Libro de Mandalas” hecho por mí para que puedas descargártelo.
representar las
características del universo. Se suelen utilizar desde tiempos remotos para concentrar la energía en un solo punto durante la meditación. Muchas son las culturas y religiones que poseen configuraciones mandálicas (con intención espiritual): los Mandalas Hindúes son lineales, los budistas son más figurativos y puedes encontrar Mandalas incluso en el arte cristiano medieval.
Es muy probable que esta universalidad de las figuras mandálicas se deba al hecho de que las formas concéntricas sugieren una idea de perfección (de equidistancia con respecto a un centro) y de que el perímetro del círculo evoque el eterno retorno de los ciclos de la naturaleza.
Dentro de las múltiples técnicas de relajación orientales, se encuentra la de pintar mándalas. Esta técnica de relajación no requiere ninguna disciplina expresa, como puede serlo en otras, ya que quien está haciéndolo lo colorea según sus gustos estéticos e imaginativos. La pueden realizar personas de cualquier edad, siendo además una actividad que fortalece la creatividad. Según los expertos éstos son los beneficios de colorear Mandalas para los niños:
1. Potencia su capacidad de atención, concentración y memoria: durante el proceso el niño se abstrae de lo que le rodea permitiendo que su agitación interior desaparezca.
2. Fomenta el control y el dominio del cuerpo, sobre todo la motricidad fina, lo que favorece la capacidad de escritura y su lateralidad.
3. Equilibra los dos hemisferios cerebrales, tan importante para un buen aprendizaje.
4. Desarrolla la paciencia: ya que esta técnica requiere tiempo y tranquilidad.
5. Fortalece el descanso y el sueño.
6. Combate el estrés y la tensión.
7. Estimula la creatividad, la imaginación y la libre expresión
8. Ayuda a la formación de la inteligencia y el razonamiento
9. Ayuda también a ampliar la conciencia y la intuición
10. Fortalece su percepción espacial, le hará mejorar en cómo él se sitúa en el espacio y ayuda en el desarrollo del esquema corporal
11. Desarrolla sus sentidos y la capacidad de percepción
12. Mejora el equilibrio interno y mental: la calma
13. Es un buen medio para iniciar a la meditación
Y el que considero más importante: dibujar o colorear Mandalas resulta una vivencia agradable, un proceso de autoconocimiento, de expresión de tus sentimientos y de expresión a través del arte, sientes relajación, calma, diversión, comodidad y felicidad.
Por otro lado, múltiples son los estudios de ésta técnica aplicada a la educación y lo que los expertos concluyen es que:
Ésta técnica ayuda al tratamiento de TDAH. Los niños con TDAH que realizan esta técnica un par de horas a la semana durante dos meses, mejoran su concentración y su capacidad de atención.
Como bien dijo el psiquiatra Carl Gustav Jung: “Pintar mandalas calma y relaja la psyche”. La técnica se puede desarrollar de muchas maneras: coloreando con ceras, rotuladores, pinceles…
Lo que sí se debe tener en cuenta es:
1. A la hora de pintar se debe mantener la dirección con la que se empezó y se debe acabar de pintar en ese momento, de no ser así no se pintará al día siguiente por ejemplo porque el estado de ánimo del que pinta será otro.
2. Es muy importante que la actividad no sea dirigida: quien esté coloreando el Mandala debe tener total libertad de elección de colores, para potenciar así la imaginación, la creatividad…, aunque a simple vista no combinen y el resultado “no guste” estará bien siendo ésta la elección del que pinta.
3. Durante el proceso se debe crear un ambiente idóneo para la concentración y relajación: estar en silencio, no hacer interrupciones, poner música de relajación (de fondo y suave).
Próximamente colgaré un “Libro de Mandalas” hecho por mí para que puedas descargártelo.
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